Revista Anestesia

𝙴𝚕 𝚍𝚘𝚕𝚘𝚛 𝚜𝚎 𝚚𝚞𝚒𝚝𝚊 𝚌𝚘𝚗 𝚕𝚎𝚝𝚛𝚊𝚜

Poemas de Daniel Acevedo

Autor: Daniel Acevedo 

Febrero 2024

 

La capa roja

 

Ella camina por el bosque

Oculta

Tras los troncos

De pinos, robles y arrayanes

 

Él la busca

Intenta atrapar

Un poco de su estela carmesí

De la torpe luz

Que queda bajo sus zapatillas

 

Entona la canción

Que le enseñó su abuela

Mientras agita suavemente

La canastilla de galletas y tortas

 

Pero ella levita

No habita la tierra

Su paso es danza

Sobre los campos

De crisantemos y margaritas

 

Sus fauces se deleitan

Con el sueño de la caída

Sus largas orejas

Escuchan atentamente

La profana melodía del deseo

 

La infancia es un relato

Escrito en el tallo del eucalipto

Allí se queda, en la crisálida,

Cuando la mujer al fin

abre sus pétalos rojos

 

El lobo es testigo del milagro

Obnubilado

Agita sus garras y hace el último intento

 

No hay preguntas

No hay respuestas

 

Solo el mordisco impetuoso

De un querubín hambriento

 

 

 

 

México

 

Dicen que la muerte es la reina

de la antigua ciudad de los mexicas

Ella deambula entre altas ventanas

tacos y flores de cempasúchil

 

Los templos se reproducen

cruces, santos, guadalupanas

Ecos de otros tiempos

del dios que reemplazó

a la serpiente emplumada

 

Urbe construida sobre otra

Los fantasmas de Tenochtitlan

emergen con el llanto del cielo

y el canto de los jilgueros.

 

Los organilleros movilizan el cilindro

y entonan la melodía del mono

Resistencia circular

contra la agreste oscuridad

de la urbe que creció.

 

Los voladores de Papantla

despiertan con su danza

el caos primigenio

Donde entre hilos de algodón

se cuece en una olla de barro

la fertilidad de la tierra

El ombligo de la luna

 

al interior del lago Texcoco

es parte del abdomen

de una diosa ancestral

Que se niega a perecer

y que aún evoca,

dulce sabor del pecado,

algunos cantos eróticos.

 

Nosotros estamos allí

pequeños, diminutos

en la vastedad sin nombre

Testigos de un misterio

que solo es accesible

a los iniciados del cacao

a los niños que, torpes,

intentan pintar

sobre un cielo opaco

la constelación del sol.

 

 

 

 

 

 

 

El ritual de la pirinola

 

Bailar como trompos de madera

levitar sobre la pista del casón antiguo

Es la imagen auténtica

de dos yoyos hambrientos que

Poco a poco

Descuerdan sus hilos

 

Dar un paso y alzar la pierna

Para alcanzar la baldosa azul

Donde naufraga la ruina

Y aparece el enojo erótico

El palpitar del sol.

 

Caer lentamente y levantarse

Ante el sonoro palmotear de los tambores

Como el catapis de los ángeles

Como los dados de un embaucador

 

Es la irrupción del baile

El descubrimiento de una tierra exótica

Hay roces en las pieles

Y los mapas se calcan

En la pupila del ojo

Que no durmió.

 

Las piernas continuaran

su ritual de pirinola

hasta que aparezca

entre montañas

el astro rey

 

La señal de cierre

No es el fin de la música

Sino el toque juguetón

La rugosa textura

entre dos labios dulces

 

que

          finalmente

                               se han quedado sin voz.

 

 

 

 

 

Daniel Acevedo nació en Medellín en 1986. Es poeta, gestor cultural e historiador, magister en estudios literarios de la Universidad de Buenos Aires y tallerista de escritura creativa en El Retiro, Antioquia.

 

Ha participado en diversos eventos dentro y fuera de Colombia. Se destacan el XXVII Festival Internacional de poesía de Medellín, El 6 Festival Caravana de Poesía en Perú, el Festival Internacional de Poesía de La Habana, La Feria del Libro de la Habana, FILVEN Feria del libro de Venezuela y 16º Encuentro Poetas y Narradores de las Dos Orillas, Uruguay, donde obtuvo el reconocimiento “Arturo Cuadrado” a mejor poeta joven.


Fue ganador del XVII Premio Nacional de Poesía Eduardo Carranza Fernández. También fue mención de honor, segundo puesto, en el VI Concurso Nacional de Cuento de EPM y Mención de honor en el XVII concurso de Cuento Ciudad de Pupiales. Fue ganador de los estímulos de la Gobernación de Antioquia a creación de libro de poesía en 2017, con su poemario “Ritual de Vuelo”. El poemario versa sobre la importancia del aire y su relación con el entorno urbano y los cuerpos que lo habitan. 

 

Algunos de sus poemas han sido publicados en diferentes medios y antologías impresas y digitales de Colombia, México, Argentina y en una antología de poesía en Francia. Es uno de los coordinadores del colectivo poético Nuevas Voces.