Revista Anestesia

𝙴𝚕 𝚍𝚘𝚕𝚘𝚛 𝚜𝚎 𝚚𝚞𝚒𝚝𝚊 𝚌𝚘𝚗 𝚕𝚎𝚝𝚛𝚊𝚜

Poema de Víctor Coral

 i. m. Ángel Ortuño.

 

 

 

1

 

Entonces llego al umbral.

Toco la puerta

(es decir

extiendo mis manos

y la toco con las yemas).

Nadie abre.

La puerta se entorna hacia dentro.

Ingreso. Parpadeo.

Mis ojos se habitúan a la penumbra.

Entre muebles desvaídos

y cortinas color polvo

la veo:

un ánima desanimada en fuga.

 

 

 2

 

 

Sentado al borde de la alberca

miro el ocaso lento:

harapos violetas

rayones anaranjados

nubecillas teñidas de plata…

 

Inspiro con fuerza.

¿Entra la sombría energía

en mi recinto así?

 

Ni idea.

 

Meto la punta de mis pies

en el agua.

La sensación me estremece.

Luego

se instala un vacío.

 

 

 

 3

 

 

Miro hacia afuera por la ventana.

Rama gris del ficus.

En un vórtice enramado

un nido.

 

Tumulto de aves entre las hojas.

 

Los pájaros abandonan el nido.

Desaparecen en el aire gris.

Me quedo mirando la escena:

‘Mi mente también

es un nido vacío’

 

Los pensamientos-pájaros

volaron y desaparecieron en el aire.

 

 

4

 

 

Sentado en la oscuridad

sobre un sillón rojo

no escucho ya mis pensamientos.

 

Me levanto sólo para hacer un cambio:

abro la ventana.

Un río de aire frío

atraviesa mi cuerpo

llena toda la habitación.

 

¿Cómo no sentir que ese flujo

perpetúa cosas y seres?

 

–Cosas y seres sólo cuentas

en el rosario azul de la existencia.

 

 

 

 

5

 

 

Apretar el lapicero contra la hoja;
dejar que fluya su punta.
Apretar de nuevo,
dejar signos solos sin sentido.

 

–respira, respira
roe el ritmo raudo del poema—

 

Apretar los pensamientos con silencios.
Conjurar los silencios con nada.
Que el lienzo mate de mi mente
mate los errores del deseo.

 

–respira, respira
Roe el ritmo roto del poema—

 

En el espejo de la habitación
veo mi sombra afanada sobre el papel:
la tinta líquida fluye, fluye…

¿Voy a preocuparme así de las palabras?

Las palabras huyen hacia adentro
se hacen uno con el flujo de mi sangre.

 

–Respira, respira
roe el ritmo roto del poema–

 

 

 

Víctor Coral nació en Barranco, Lima, Perú, en diciembre de 1968. Estudió Ciencias Administrativas y Literatura en la UNMSM. En 1998 fundó la revista literaria Ajos & Zafiros. En el mismo año fue primer finalista del concurso de cuentos de la revista Caretas. En 2001 publicó la primera edición de su primer poemario, Luz de Limbo. Luego vinieron Cielo Estrellado (2004), Parabellum, (2008), Luz de limbo (2005, segunda edición), Poseía (2011), tvpr (2014), Acróstico Deleuziano (Lima, Ciudad de México, 2019) y Nada de este mundo, (Chile, 2020). En el año 2021 fue finalista del Premio Internacional de Poesía Copé, con Cuadernillo peruano de los diálogos. Ha representado a su país en la FIL Guadalajara 2005. Tiene dos novelas publicadas: Rito de Paso (2006) y Migraciones (2009), y una inédita. Poemas, artículos y ensayos suyos han sido publicados en Letras Libres; Hueso Húmero; Luvina; Periódico de Poesía y otros. Actualmente prepara un libro sobre Trilce, de Vallejo, por los 100 años de su publicación, y escribe un nuevo poemario titulado hasta ahora Crátera, Pipa, Siseo.