Revista Anestesia

𝙴𝚕 𝚍𝚘𝚕𝚘𝚛 𝚜𝚎 𝚚𝚞𝚒𝚝𝚊 𝚌𝚘𝚗 𝚕𝚎𝚝𝚛𝚊𝚜

Entrevista a Adriana Tafoya

Tafoya y la poética del conflicto

Por Fernando Sánchez Alvarado

Marzo 2023

Cuando conocí a Adriana Tafoya fue ya hace unos años, ella presentó su libro Malicia Para niños en la primaria en que trabajaba, ese día tuvimos problemas con la instalación del sonido, y cuando los niños y sus padres esperaban la presentación de la gran poeta, con mucha pena me acerqué a ella para decirle que debíamos esperar un poco más porque el sonido no funcionaba bien, un “no te preocupes yo soy todo terreno”  me calmó y me ayudó a hablar con ella, esto propició que el evento saliera excelente, y muchos niños pudieron acercarse a las reflexiones sobre la muerte, el alcoholismo, la pobreza o la política, que guardan las páginas de Adriana.

Tiempo después pude tratarla de manera más personal y me uní a las filas de su taller de poesía, fue cuando supe que era la directora de la editorial independiente Verso Destierro, me impactó mucho cuando me contó que gracias a uno de sus libros de poesía (Enroque de flanco indistinto) pudo jugar una partida de ajedrez contra el gran maestro Garry Kasparov, me habló de sus presentaciones en penitenciarías de la ciudad, así como de su gran proyecto poético y a todas luces contracultural, el torneo Adversario en el cuadrilatero, justa en la que replicando un poco a la lucha libre y al boxeo, poetas se enfrentan de dos a tres caídas, para mostrar la fortaleza al soltar versos y contragolpes.

Para mí, hablar con la gran maestra (De poesía) Adriana Tafoya, es tratar con alguien que sabe de la manufactura literaria, pues lleva un papel como divulgadora, crítica, editora y maestra, que le ha valido para ganar la presea Gran Mujer de México

A continuación les muestro una pequeña entrevista de quien considero mi mentora tanto en las letras como en lo moral, de aquí me gustaría que destaquemos la importancia de la poesía y cómo es que esta va de la mano de la filosofía, al representar un ejercicio libre y reflexivo de la palabra.

Como escritora entiendo que vives de esto, lejos de trabajar en un empleo de 8 horas por 6 días a la semana ¿Qué hace la poesía por ti?

Me ofrece la oportunidad de proponer y de crear. Lo que propongo a través de la escritura y el proyecto, es una poética de “conflicto”, que provoque diferentes reacciones en el lector, para que de esta forma lo inste a la crítica, la opinión, la reflexión, pues considero es la mejor manera de dialogar con el lector y el escucha de poesía. Es tácito en mi trabajo poético, el compromiso y la responsabilidad social que ejecuto a través de éste, porque “el arte por el arte”, considero es una barbaridad, sobre todo en este tiempo.

¿Cuándo se presentó la poesía en tu vida?

Se presentó en lo solitario en el contexto de mi niñez, pues una gran parte de mis primeros años, los tuve recluidos en las habitaciones de la casa de mi abuela materna, donde la única manera de salir, de viajar y vivir era leyendo. Ahora pienso que sigue siendo el camino más hermoso y viable para el viaje. Ya de los poetas que dejaron huella en mi adolescencia, puedo mencionar a Enrique González Martínez principalmente.

¿Qué leíste para desarrollar tu primer libro Animales seniles?¿Cuál era tu propósito con ese libro?       

Ahora no recuerdo que lecturas nutrieron este libro, pero sí recuerdo un contexto de fuerte “inspiración”, de un poderoso deseo de crear una estética “propia”, de cuestionar qué era realmente la vejez, no solo la física, sino la ideológica. También de crear versos que en su individualidad tuvieran solidez y objetivo.

Como poeta, a la manera de un músico, me imagino que hay ciertos acordes o figuras de las que te apoyas ¿De qué manera estructuras tus poemas?¿Cómo trabajas rimas, así como la metáfora, el símil, la comparación o la hipérbole?  

             Utilizo varios recursos poéticos, pues considero no están “pasados de moda” como algunos lectores, incluso poetas suelen decir sin reflexión alguna. Supongo que les es más cómodo, por no decir fácil, recurrir a la prosa o mejor dicho al mero recurso narrativo y no “quebrarse la cabeza de más”, tratando de crear con los versos de un poema, una sinestesia, una imagen, un símil, es más; una metáfora.

Aparte del rigor, tengo algunas manías, mejor dicho “obsesiones”. Para escribir un libro de poemas, suelo definir el tema de antemano, y sujetar a éste varios otros subtemas. Posteriormente defino los recursos estéticos en que se sustentará la obra. También escribo un glosario de las palabras que considero más pertinentes para los textos. Luego me doy a la tarea de los “apuntes al azar”, me refiero a que toda idea, frase o verso que me venga a la mente y piense que me pueda funcionar, tomo nota y la guardo para ver si puede ser integrada en el futuro a la estructura de algún poema en ciernes. Procuro que en todo momento los códigos o símbolos incluidos, no se contradigan entre sí, a menos que la intensión sea causar esa transgresión o nulidad.

Al final de todo esto, lo que persigo en el poema, es ese efecto que de puerta a la parte más blanda y emocional del lector. Algo que me es importante mencionar, es que nunca pasó por alto cómo se escucha el poema leído en voz alta.

En muchas conversaciones te he escuchado mencionar diferentes poetas que tú consideras importantes, pero de verdad me encantaría saber ¿qué poetas consideras que han influido en ti? y ¿cómo encontraste tu voz poética?

Las voces de algunos poetas me han resultado beneficiosas a medida de su aporte ideológico-filosófico pues a mi criterio, un poeta debe en muchos sentidos ser un pensador, un intelectual, no un ente escribe versos.

 Algunos de los poetas que para mi llenan estos requisitos son  Juana Inés de la Cruz, Enrique González Martínez, Enrique González Rojo Arthur, Gabriel Said, Rosario Castellanos, Ikram Antaki, León Felipe, Fernando Pessoa. Los menciono como la memoria me lo permite, pero desde luego hay algunos más que están guardados ahora en la capa del subconsciente y la pluma. Estas lecturas naturalmente me encausaron a buscar una voz y, esa voz es el conocimiento de mi personalidad de los detalles que me diferencian como individuo.

A propósito del aporte ideológico-filosófico que la poesía tiene, en tu libro Los rituales de la tristeza he notado algunas ideas que colindan con el feminismo, el marxismo e incluso el platonismo ¿qué pensadores y filosofías, consideras que han influido más en Adriana Tafoya?

Si bien, es atinada en mí, la visión feminista, (que en realidad es la simpatía porque las mujeres seamos valoradas como parte de la humanidad), he nutrido mi poética de los pensamientos que considero más afines con mi búsqueda. Pero citando a Ramón Carrillo; diría que nuestras verdades no deben ser dichas a los demás sino en lenguaje metafórico o parabólico, porque a la verdad desnuda no la comprende nadie o la entienden mal y se volverá contra nosotros.

Acoto que a diferencia de otros poetas, no pienso que el marxismo sea obsoleto, sin embargo, mi inclinación está más cercana a la minarquía. Sobre Platón, ni pensarlo, no lo considero benigno.

Por lo que he leído de ti, así como en diversas conversaciones, he notado que tu propuesta poética coquetea mucho con el maniqueísmo ¿Crees que la vida es como un ajedrez dividido en bandos?

Es buena la pregunta, para aclarar esa impresión errónea, pues lejos de un maniqueísmo, mi intensión ha sido rescatar o reivindicar la filosofía taoísta, por ser una de las pocas corrientes de pensamiento femenino, que está en equilibrio con la naturaleza.

Sobre la vida, en gran parte, sí la considero como el ajedrez, en el sentido de las múltiples decisiones que se pueden tomar, sin olvidar el posible resultado.

Sin embargo, no olvidemos que dentro de la poesía; pensamientos políticos, religiosos o filosóficos, son el resultado de las metáforas del mundo interior, que se rigen por una lógica diferente. Coincido con Milton Erikson, al afirmar que las metáforas sirven como un puente a las resistencias de la mente consciente, logrando comunicarse en directo con el inconsciente. El lenguaje mismo, es en sí una metáfora. Las palabras se convierten en símbolos para formar parte de la experiencia sensorial. Cuando usamos el lenguaje, toda teoría, independientemente de cuan científica sea, se convierte en metáfora, en una representación simbólica.

Tú no sólo eres poeta, o sea, estás involucrada en la formación de nuevas plumas, en la difusión y divulgación de poesía transgresora, en la edición, en la crítica y básicamente en toda la manufactura poética ¿qué es lo que más disfrutas?

Todo lo mencionado en esta pregunta me da profunda satisfacción, pues considero parte de mi responsabilidad social, promover a nuevos talentos y más aún, fomentar el gusto por leer poesía en un país donde por desgracia, es el género más relegado.

 También, por supuesto disfruto muchísimo mi faceta de creadora, escribir me condujo a todo lo demás; producir una revista, fundar una editorial y después dar vida al Torneo de Poesía Adversario en el Cuadrilátero, entre otros muchos proyectos ahora realizados y otros por realizar, entre ellos la preparación de un nuevo libro de poesía.

Creo que uno de los retos más grandes por los que has atravesado es fundar una Editorial independiente de poesía ¿De dónde te vino esa idea?

  El comienzo se dio en 2004, cuando fundé junto con otros colaboradores la revista Verso destierro, para dar lugar a poetas del surgimiento con marcada tendencia a la poética con contenido, encaminada a la reflexión y al conocimiento. El lema de Verso destierro desde entonces a sido; poesía para evolucionarte y ser.

Posteriormente en 2006 se inaugura la editorial, pues la necesidad propia y de otros escritores por promover la poesía como genero amado, a sido un motor voluntarioso que a dado fuerza a todo lo demás.

Gracias a tu trabajo como editora y maestra, has dado a conocer, así como has impulsado la carrera de diferentes poetas ¿Cómo lanzar un nuevo poeta -hombre o mujer- al mercado editorial? 

En mi experiencia, lo ideal es que antes de cualquier cosa, se debe tener una obra sustentable, pues si no hay suficiente calidad en la escritura, todos los esfuerzos (me refiero a publicaciones, presentaciones, encuentros, viajes, giras, fundación de antologías, etc.) serán en vano. Pienso, no se debe olvidar que antes de trabajar el nombre, se deben trabajar los poemas.

Ya al tener cierta certeza de la obra, sólo entonces podemos hablar de la edición de un primer libro, (esto con la debida asesoría de un editor), de su difusión, de la gran cantidad de recitales y encuentros a los que se debe asistir para ser escuchado. También es de vital importancia publicar en diversas revistas y toda clase de plataformas para empezar a ser ubicado tanto por lectores como por colegas. De ahí nace la posibilidad de que el nuevo autor pueda ser tomado en cuenta en algunas antologías, por ejemplo. Debe tomarse en cuenta que es un proceso largo, un trabajo de mucha perseverancia de parte del autor. El editor pondrá a disposición lo que esté a su alcance, pero si el poeta o narrador no está consciente de que en cada lectura o recital debe dar lo mejor de él, su momento en la luz se apagará rápidamente. También si no tiene una buena lectura de su trabajo en voz alta, comenzará a matar su obra antes de crecer. Como se puede leer aquí, no todo es escribir, también es muy importante leer bien, al menos tener una buena dicción. Es perturbador escuchar a escritores que según dicen ser amantes de las letras y desear promover la lectura, cuando ellos mismos no son un ejemplo a seguir. Aún así, con lo ya comentado aquí, tener un nombre va a llevar muchos años de esfuerzo para el escritor.

Sé que tu editorial ha sido la casa de muchas nuevas voces ¿Qué deben hacer los poetas que quieran colaborar con Verso Destierro?   

             Como comenté anteriormente, se debe tener un libro preparado ya con una rigurosa corrección. Éste con una propuesta atractiva para la editorial. Saber leer en público su obra poética. Por otra parte, la editorial saca dos convocatorias para editar; una de ellas sale cada fin de año para los interesados en participar en el Torneo de Poesía Adversario en el Cuadrilátero. La otra se publica cada dos años; me refiero al Premio Latinoamericano de poesía Transgresora.

Constantemente veo que participas como divulgadora de la poesía ¿Qué eventos organiza Verso Destierro?

 Como ya comenté, contamos con un par de certámenes, pero también realizamos un ciclo de lecturas nombramos “Miércoles Itinerantes de Poesía”, que se realiza casi todo el año en diferentes recintos de la Ciudad de México. Los demás eventos consisten en presentaciones, conferencias, debates y recitales para dar a conocer a nuestros autores y a la editorial.

Ya para finalizar, cuéntanos ¿Cuál es tu último libro y qué buscas despertar en tus lectores?    

El reciente libro se titula; “Huevo moteado (transmutar los seres)”, editado por Campo Literario/ Ediciones Ultramarina, como el mismo título dice, la intención es proponer un cambio de cosmogonía, de la tradicional solar, a una lunar, buscando así, la posibilidad del equilibrio.

 

A continuación uno de mis poemas favoritos de la maestra, de su libro Los Rituales de la tristeza:

Rito de un amor poco inteligente

 

REPITO, NO SABÍA QUIÉN ERA ÉL.

Lo veo pasar por las calles, aún por avenidas,

donde el caer de la lluvia no tiene sonido, donde

            los árboles se desvanecen,

y donde por años enteros he recreado

un idilio con su figura.

No sabía nada sobre él,

de las necesidades, las obsesiones;

de los ritos de su cuerpo.

Qué pensaba de las sombras

ni qué respira al avanzar el sol;

qué apetece obtener caminando

sobre esta mugre -estas cenizas-

que ahora salen de chimeneas ocultas,

qué hambre lo mantuvo vivo para seguir

repartiendo puñetazos en los rostros de esas calles;

cuál de sus creencias y postulados

ejecuta cuando ama.

No sabía quién era,

ni qué pudo haber dentro de él.

Ni cómo besa, ni cómo sentiría yo sus manos

sobre mis piernas bajo el amparo de la falda.

Desconocía cuál era su forma de ejercer la crueldad

después de los actos del amor.

Repito,

no sabía quién era él,

mientras

paso noches, años enteros, imaginando

un idilio con su fisura

en esta cama donde duermo con mi esposo

este otro extraño

del que tampoco sé nada.

Fernando Sánchez Alvarado
 
Boxeador, estudiante de filosofía y matemáticas, sus influencias son Spider-man, Lovecraft, Mary Shelley, Stephen King y el cine de horror. Ha participado en proyectos de divulgación del horror como Lovecraft entre los mundos o las mesas de debate sobre Horror en el Colegio de Bachilleres, así como las mesas de debate sobre violencia de género. Forma parte del “taller de la noche” y “La pluma crece en la palma de la mano” publicado en la antología “Seres Abisales” por Verso Destierro, “Revista filosofía en la Red, por Filosofía en la red y “Memorias del encuentro nacional de estudiantes de filosofía” por la BUAP. Sus inclinaciones son la poesía, el cuento de ciencia ficción, de horror, de fantasía, de fantasía oscura y el relato corto. Textos suyos aparecen en la Revista Mood Magazine y en la Antología “Seres Abisales” publicado por Verso Destierro.