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Dios, la música y la religión

ILUSTRACION LA RELIGION

Dios, la música y  la religión

Por Ramiro Padilla Atondo

16 Julio 2019

Ir a la iglesia

Como una inmensa mayoría de mexicanos desde niño fui a la iglesia. Incluso antes de ser consciente de lo que se trataba. Siempre me pareció aburrido. Los rituales eran repetitivos y yo le seguía la corriente a mis padres. De hecho mi madre soñaba con que uno de sus hijos fuera sacerdote. Yo desde luego estuve eliminado desde el principio.

 

La música de las iglesias

No hay nada más espectacular que la música de las iglesias cristianas en Estados Unidos. Los recintos son construidos con una acústica maravillosa para que como en los cines la experiencia sea completa. Los coros de las iglesias cristianas son bastante mainstream. De hecho, en la nueva televisión digital se pueden contar muchísimos canales religiosos del conglomerado de razas que es la unión americana. Están representados chinos, armenios, mexicanos, vietnamitas, que intentan con menor éxito imitar el modelo musical de las iglesias afroamericanas. En mi caso, siempre asocié la música religiosa a esos órganos inmensos de las iglesias barrocas de los siglos XVIII y XIX. Siempre hubo esa sensación de enormidad, sobre todo cuando visitábamos la única catedral de la ciudad. Creo que todavía existen los vitrales con figuras de santos implacables con espadas. Son rubios y hermosos.

 

La música del propio Jesucristo

No sé si en la biblia haya referencias musicales al tiempo de Jesucristo o si en sus templos se ejecutaba algún tipo de música en sus rituales. Me pregunto si el mismo Jesucristo era musical. Como no tengo la referencia entonces lo hago por medio de una pequeña investigación que arroja un soundtrack bastante curioso; Ancient echoes de la academia Chorovaya y Alexander Sedov.

Enigma MCMCMX o algo así

 

A principios de los noventa un rumano afincado en Francia, con un éxito moderado en el pop (ese pop de teclados portátiles y camisetas de manga corta con letras japonesas) decidió darle una vuelta a la tuerca a la industria de la música sacra. De verdad no sé si llamarle música sacra. Al momento no se me ocurre algún otro nombre. El asunto fue que Michael Cretu se inventó un estilo musical que mezclaba cantos gregorianos con música electrónica, aderezada con la voz sexy de su entonces esposa Sandra Cretu, que por alguna coincidencia tuvo en un personaje bíblico su mayor éxito, María Magdalena. Su idea era que su nombre permaneciera en el anonimato. No imaginó que de manera inmediata su disco se convertiría en uno de los mayores éxitos en europa.

 

El coro de mi iglesia

Había un coro enjundioso y desafinado en la iglesia a la que iba. Era un coro formado por unas hermanas y cuñadas. No era que cantaran de maravilla, era el cancionero que tenían. Había varios clásicos de la música cristiana que después se harían universales, como el de la calzada de Emaús que recuerdo la tocaban muy bien. Tenía un toque oriental. U otra canción que se me grabó, en la cruz del calvario fue clavado Jesús, que la cantábamos con particular energía. El tiempo nos fue empujando a caminos diversos a la religión.

 

Iron maiden para principiantes

Hubo una época en la que escuchar heavy metal era considerado del diablo. En casa no lo prohibieron, aunque, debo de confesar, tampoco era que le tuvieran mucho aprecio. Un amigo del servicio militar  con verdadera devoción por la banda me escribía las letras de las canciones. Entonces fingía la voz de Bruce Dickinson y cantaba a capella The Trooper o Hallowed by the name. Por el tipo de rock que practican, puede recordar a los iniciados esos conciertos de música clásica, por su nivel de complejidad. Con el tiempo, la banda se volvió de culto. Siguiendo una tendencia muy inglesa, Jannick Jers es doctor en sociología y Bruce Dickinson puede decirse es un hombre del renacimiento.. Practica esgrima, es piloto aviador, ha escrito novelas y encima canta como los dioses. El rock pesado de la doncella de hierro es de otro nivel. Y Steve Harris, seguro de lo que hacía, se negó terminantemente a tocar punk que estaba de moda y era lo que vendía, larga vida a Steve.

 

Confiesa tus apetitos y te diré quién eres

Religión que se respete controla los apetitos carnales de sus feligreses. Se habla de bajas pasiones cuando en realidad no hay pasión más alta en el imaginario humano que la pasión sexual. Todo tiene que ver con voluntad de poder y control claro, para los feligreses, porque al parecer y por instrucción divina, los padrecitos, pastores, imanes y lo que se acumule están exentos de la represión de sus instintos.  Nietszche lo dijo en la dialéctica del amo y el esclavo. Foucault lo retomaría.

 

Imaginación musical

Asociamos por naturaleza la música a ciertos estadios de nuestra vida. Se puede decir que hay un mapa por fechas, por sentimientos. Uno va descubriendo el sentido musical a la vida por medio  de los padres, la influencia más cercana.  Mi infancia estuvo poblada de eclecticismo musical. Por un lado la banda clásica de Sinaloa, las cuatro estaciones de Vivaldi por el lado materno, y los tríos, Jorge Negrete y Pedro Infante por el lado paterno. Y por supuesto la música religiosa. El México de los setentas es más parecido al México de los cincuenta que al del nuevo milenio. Era un país en blanco y negro, religioso y conservador. El de hoy avanza en sentido contrario a la religión. La imaginación musical voltea al pasado.

 

Dios o la religión

En el libro, El fin del poder, Moisés Nahím, pensó en lo que sucede ahora en toda Latinoamérica. Las religiones protestantes generan nuevos feligreses gracias a que ofrecen servicios personalizados. Dios al alcance del bolsillo, la salvación al alcance de tu mano, arrepiéntete y llegarás al paraíso cuando te cargue el payaso. George Carlin ironizaría, hay un lugar repleto de dolor y sufrimiento, de fuego eterno, donde padecerás por toda la eternidad, pero recuerda, Dios te ama. Nunca como ahora, las religiones y el concepto de Dios se escrutinizan. Europa cierra iglesias y las convierte en bibliotecas, el mundo se parte en dos, los fundamentalismos se niegan a morir. Hoy nos causa extrañeza el uso de Dios  como pretexto para declarar guerras. Pero ese viejo Dios ha estado presente en la mayoría de los conflictos. No uses las balas de Dios en vano.

 

¿Un nuevo mundo posible?

Siempre me pregunté qué pasaría si de repente todos dejaran de creer. Que en un arrebato, decidiéramos que el premio a una vida de sufrimiento no tendrá ningún tipo de recompensa en el más allá.  Los negros en el sur profundo le cantaron a la tierra perdida en el idioma de sus captores, aceptaron su camino a  una religión a fuerza de golpes, sin las mismas garantías. Y de ese sufrimiento surgió el blues, el jazz. Canciones  que después retumbarían en esas maravillosas iglesias de madera cercanas a las plantaciones. Si Dios se materializara, sería un negro que toca un blues triste.

 

Soundtrack

Ancient echoes, Alexander Zedov

The principles of lust, Enigma

Callas went away, Enigma

Hallowed by the name, Iron Maiden

The rime of the ancient mariner, Iron Maiden

Robert Johnson, discografía completa

Por la calzada de Emaús, música cristiana